Esto se acaba

Me quedan unas horas en el paraíso y por vigesimoquinto año consecutivo solo puedo decir que ha sido genial, ha habido días buenos de siestas al sol y caminatas y días malos de comer/dormir/comer/dormir y ya por la tarde al borde del aburrimiento meterse en la piscina con un frío de narices ante el escarnio del pueblo, porque estamos en todo el medio y el momento bañito dando diente con diente lo ha visto todo hijo de vecino, en el fondo se morían de envidia porque estaban también aburridos de tanto ver nubes.

Soy una persona bastante maniática con mis cosas y con el orden, probablemente desde que vivo sola se me ha acentuado, me gusta que todo esté en su sitio y que no me cojan nada sin avisar al igual que yo no cojo sin avisar las cosas de los demás. Sin embargo estos días familiares cambio el chip totalmente, si no me moriría, ayer y hoy estamos 11 personas bajo el mismo techo así que se oyen frases como estas:

¿Ese no es mi jersey? ah, puede que sí ¿lo quieres? no, es igual, ya te cojo uno tuyo
¿Y esa camiseta no era mía? era, me la regalaste el año pasado porque te quedaba grande, toma esta que a mí me queda justa
¿Dónde están las llaves de mi coche? se lo han llevado para hacer la compra. Cuando me lo devuelven está el asiento muy atrás y las marchas y el volante diferentes a como las dejo yo pero no me importa, en otra situación probablemente me enfadaría por la usurpación pero ahora no es plan.
¿No sacais más vasos? es igual, uno para cada dos, bebe del otro lado
Cojo esta toalla, no sé si sería la mía, como son todas iguales...
Me termino este yogur empezado, hay más en la nevera
¿Quién ha recogido la ropa seca? me faltan calcetines. No creo, habrás mirado mal; espera espera ¿son estos que llevo puestos? sí ¿te los devuelvo ahora o ya mañana? si eso mejor mañana o quédatelos si te gustan
¿Hay alguien en este baño? sí, me estoy duchando. Bueno, paso un momento a hacer pis y lavarme los dientes, tú a lo tuyo como si nada, para cuando salgas ya me he ido. Vale, déjame la toalla a mano

Creo que se llama compartir y para unos días al año mola además de que es inevitable: a los pequeños les da todo igual y entre los más mayores hay alguno bastante despistado así que es adaptarte al ambiente o morir. Donde hay confianza da asco porque estas cosas solo se pueden hacer en familia, algunas igual las haría entre amigos pero la mayoría ni eso.

INCREÍBLE que después de tantos años sigamos repitiendo y no falle nadie, os quiero un montón, una vez más voy a echar esto de menos el resto del año porque desde que estamos tan dispersados no somos capaces de juntarnos ni en Navidad, solo estos cuatro o cinco días de julio en plan Heidi. No me leeis (o eso espero) pero que sepais que por mucho que nos veamos de pocos en pocos el resto del año y que hablemos tanto por teléfono estos días no los cambio por nada, creo que vosotros tampoco.

Ahora toca la vuelta al asfalto, al calor sofocante, al despertador, tengo que ir al súper, al banco y hablar con Vodafone, arreglar la humedad del salón y pasar la revisión del coche, un par de reuniones de trabajo y por supuesto quedar con todos mis amigos, muchísimo curro hasta fin de mes que solo de pensarlo me da algo, pero por agobiarme ahora no avanzo nada.

El finde me iré otra vez a la playa porque lo de ponerme morena con este tiempo no ha podido ser, otra vez no parar y dormir poquísimo durante dos largas semanas.

En agosto toca Londres con mis niños de la facultad, qué ganas de juntarnos otra vez.

CÓMO ME GUSTA EL VERANO