Desenganchándome

Me estoy quitando un poco de mi adicción a internet, tenía un vicio exagerado y eso no es bueno. Sigo mirando mil veces al día el correo, los blogs y el face pero ya no es esa obsesión que tenía hace unos meses que me hacía pasar horas y horas seguidas y casi no hacía más en todo el día que dormir, trabajar y estar con el portátil. Ahora paso mucho tiempo, por supuesto, pero ni escribo tantos mails, ni cambio 3 veces al día el estado del face, ni publico tanto en el blog, le quitaba horas al sueño y eso no puede ser bueno. Si no escribes tantos mails no recibes tantos, si no actualizas ni comentas tanto en el face no te llegan tantas notificaciones y si publicas menos en el blog menos lo miras y lo comentas también. Lógico.

Tengo una tendencia impresionante a hacerme adicta a todas estas cosas así que me pongo límites, por ejemplo me prohíbo terminantemente Series Yonkis porque fijo que me iban a encantar esas series, como a todo el mundo, pero ya lo que me faltaba era ponerme a verlas todas. Me niego a hacerme cuenta en Twitter y Tuenti, creo que con el Face voy sobrada de redes sociales y exhibicionismo, no tengo más que 69 amigos porque no me convence eso de que 200 o 300 personas vean mis fotos y paridas varias, y suerte que el chat últimamente se bloquea porque también mataba horas y horas chateando, ahora lo suelo tener desactivado. De las 3 cuentas de correo la profesional sólo la miro de lunes a viernes, la superpersonal una vez al día y sólo la personal (amigos y familia) es la que suelo tener abierta.

Ya no miro todos los días las cuentas bancarias porque es bobada, con un par de veces a la semana es suficiente, y las páginas del curro las he dejado sólo para los días laborables. También me niego a utilizar las aplicaciones esas del face (farmville y demás) porque fijo que me gustarían y a entrar en las demás webs de juegos, hace tiempo me enganché a un juego super tonto de un helicóptero que se manejaba sólo con el ratón esquivando unos cubos y menos mal que borré el mail en el que me lo habían adjuntando, porque no paraba de batir records. Otra vez una amiga que no manejaba internet quería vender unas cosas y me pidió que se las colgara en la web de compraventa, pues también me hice adicta a esa página, todo el día mirando las respuestas a los anuncios que puse y ya de paso el resto de los anuncios de mi ciudad, tengo mucho peligro pero por suerte lo controlo y soy capaz de quitarme cuando veo que se me está yendo la pinza.

Tengo posibilidad de conectarme a internet en el móvil y las tarifas no son nada caras pero me niego a contratarlo, sería mi perdición así que en tal caso cuando quiero mirar algo compruebo si hay wifi (que hay en mil sitios) pero si no hay me aguanto hasta que llegue a casa. ¿Y el famoso Iphone? sí, claaaaaaro, ni regalado quiero yo semejante pasatiempos, sería como darle un vinito a un alcohólico o como llevar un ludópata a un Casino.

Yo puedo, se trata también de tener continuamente planes alternativos en casa o por ahí que te desconecten totalmente de las tecnologías y te hagan socializarte a la antigua usanza.

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